1. Cuando el pobre nada tiene y aún reparte,
cuando el hombre pasa sed y agua nos da,
cuando el débil a su hermano fortalece,
va Dios mismo en nuestro mismo caminar.
2. Cuando sufre un hombre y logra su consuelo,
cuando espera y no se cansa de esperar,
cuando ama aunque el odio le rodee,
va Dios mismo en nuestro mismo caminar.
3. Cuando crece la alegría y nos inunda,
cuando dicen nuestros labios la verdad,
cuando amamos el sentir de los sencillos,
va Dios mismo en nuestro mismo caminar.
4. Cuando abunda el bien y llena los hogares,
cuando un hombre donde hay guerra pone paz,
cuando “hermano” le llamamos al extraño,
va Dios mismo en nuestro mismo caminar.
Autor: J. A. Olivar